Considerado uno de los cantantes de flamenco más importantes de la historia musical, Camarón de la Isla logró una carrera en la industria que sentó las bases para muchos otros artistas en España. Sin embargo, su muerte siempre había estado rodeada de cierto misterio y esta es la verdadera historia de su adiós más de tres décadas después de que ocurriera.
Oficialmente, el andaluz, con 17 discos a sus espaldas, murió el 2 de julio de 1992 como consecuencia de un cáncer de pulmón que se desarrolló, supuestamente, por su adicción al tabaco, que siempre le acompañaba allá por donde iba, incluso en sus innumerables conciertos por todo el país.
Durante sus últimos años, el deterioro físico de Camarón de la Isla era algo evidente y en cada aparición pública se apreciaba que no gozaba de toda la salud que cabría esperar en una persona que entonces apenas rondaba los 40 años. Cuando le diagnosticaron el cáncer, el artista voló a Estados Unidos para ponerse en las manos de los mejores expertos del país.
Las otras teorías sobre el viaje de Camarón de la Isla a Estados Unidos
No obstante, ese viaje acabó por provocar una oleada de opiniones de todo tipo acerca del verdadero motivo por el que el de San Fernando había decidido trasladarse. Mientras algunos medios informaron de que Camarón de la Isla se encontraba ingresado en una clínica de Nueva York para someterse al correspondiente tratamiento contra su enfermedad, muchos otros comenzaron a lanzar otras teorías.
Algunas de esas especulaciones apuntaron a que el andaluz, en realidad, había viajado a Estados Unidos a tratar su adicción a las drogas. Otras, en cambio, defendieron que Camarón tenía VIH y quería ocultar dicha enfermedad a todos.
Nada de aquello era real, pero como ocurre a día de hoy con la difusión de 'fake news' en redes sociales, muchos llegaron a dudar del cáncer de Camarón de la Isla. Todo aquello acabó por venirse abajo cuando, de vuelta en España e ingresado en Badalona, murió el 2 de julio de 1992 por culpa del tabaco y que le había hecho desarrollar el cáncer. En su momento llegó a decirse que consumía hasta 60 cigarrillos diarios. Aquello le costó decir adiós a la temprana edad de 41 años.
Comentarios